'En el nombre de Rocío' pone en el foco la actitud de los Mohedano y Ortega Cano durante la etapa en Houston

El octavo capítulo de 'En el nombre de Rocío' está dedicado a toda la etapa de enfermedad de Rocío Jurado en Houston. La cantante voló hasta la ciudad estadounidense para tratar de curar el cáncer que padecía, época en la que varios miembros del clan Mohedano estuvieron a su lado. Rocío Carrasco y Rosa Benito fueron las primeras en llegar, pero, poco después, justo cuando la primera tuvo que volver a España por temas de la custodia de sus hijos, Jurado empeoró y la familia se desplazó hasta allí.

En ese momento comienza una etapa de tres meses en donde la familia vivía en un apartamento de dos pisos y hacían turnos para cuidarla. Además de Benito, Carrasco y Fidel Albiac, José Ortega Cano, Amador Mohedano, Gloria Mohedano y el marido de esta se mudaron a Houston. La protagonista de la docuserie explica que la hermana de su madre se quejaba de todo y que incluso la cantante pensaba que era muy pesada porque no callaba.

Por otro lado, pone en el foco a Amador Mohedano, a quien acusa de pasar información a Antonio David Flores. En suma, piensa que él fue quien pasó información a los medios, aunque no tiene pruebas de ello. Sin embargo, lo más duro del relato llega cuando habla de Ortega Cano, de quien comenta que tuvo un bajón muy grande a raíz de la enfermedad de su mujer relacionado con el alcoholismo.

Rocío Carrasco relata que lo encontró tumbado por el alcohol en una planta del hospital mientras Rocío Jurado lo buscaba. Así, ha explicado el origen de la frase "ni aquí me vas a respetar" y de la enorme bronca que tuvieron ambos en el apartamento donde vivían en donde el torero le soltó a Carrasco que ella estaba matando a su madre.