Last Resort

'Last Resort', traducido en español como 'Último destino', es una serie dramática americana creada por Shawn Ryan y Karl Gajdusek, emitida en la cadena ABC desde septiembre de 2012 a enero de 2013. Consta de una única temporada de 13 episodios.

La serie se centra en el submarino estadounidense USS Colorado, que recibe la orden de lanzar misiles nucleares contra Paquistán tras recatar a un equipo de las fuerzas especiales de la costa de aquel país. El comandante al mando del submarino, Marcus Chaplin (Andre Braugher) se niega a creer y obedecer las órdenes, y es reemplazado por su segundo de a bordo, Sam Kendall (Scott Speedman), que también se niega a utilizar las armas nucleares. Finalmente, Estados Unidos acaba bombardeando Paquistán con otros submarinos, y consideran al USS Colorado como insumiso.

El submarino acaba pidiendo refugio en la isla ficticia, a donde Estados Unidos manda un par de bombarderos para atacarles. A modo de muestra de fuerza, el USS Colorado acaba disparando un misil nuclear a Estados Unidos, que sobrevuela Washington D.C. y acaba explotando en el Atlántico, en una explosión visible tanto desde el propio DC como desde Nueva York.

A lo largo de la serie los miembros del USS Colorado deben mostrar a su Gobierno y al Mundo que son inocentes para poder regresar a su país. La serie incluye tramas de acción locales con geopolítica de alto nivel.

El reparto de 'Last Resort' lo componen, además de Braugher y Speedman, Daisy Betts como la Lugarteniente Grace Shepard, la navegadora del barco; Robert Patrick es el Comandante Joseph Prosser; Camille De Pazzis es Sophie Girard, comandante francesa y de la OTAN; Dichen Lachman da vida a Tani Tumrenjack, dueño del Bar Sainte Marina; Daniel Lissing es James King, un Navy SEAL; Sarh Ngaujah como Kyle Sinclair, un despota local de Sainte Marina; y Autumn Reeser interpreta a Kylie Sinclair, una encargada de hacer lobby en Washington para la compañía de armas de su familia.

La serie se rodó en la isla hawaina de Oahu y logró por lo general buenas críticas, aunque la audiencia no acompañó. Estrenada con 9,31 millones de espectadores, fue bajando hasta caer por debajo de los 5 millones. ABC decidió no renovar la serie, aunque emitió todos los episodios encargados.