Foro Águila Roja
Culturilla general: La Adelfa
Culturilla general: La Adelfa
Adelfa.
Tras el nombre científico de 'Nerium Oleander' se esconde una planta de la familia de las apocinaceae, de origen plenamente mediterráneo. La adelfa es un arbusto cuyo nombre deriva de una deidad marina llamada Nereus, famoso en mitología por sus hijas, las Neréidas. Por su parte, el término 'oleander' se relaciona con la semejanza de las hojas del árbol del olivo y a su correspondiente nombre latino. Llama la atención su denominación vasca 'Eriotz-orri', que significa hoja de muerte, seguramente por su toxicidad.
Descripción
Se trata de un arbusto perennifolio que llega a alcanzar los 4 metros de altura. La corteza es de un tono entre el gris y el marrón claro; igualmente reseñable es lo lisa y recta que es. Su crecimiento es bastante rápido y presenta unas hojas con un visible nervio central que se ramifica de forma múltiple. El color de la hoja es de un verde muy intenso. Las flores de la adelfa poseen una fragancia penetrante y destacan por su voluptuosidad y por sus colores llamativos: blancas, amarillas, anaranjadas, rojas y rosas.
Cultivo
adelfaPodemos encontrarla poblando las orillas de caudales de agua, en terrenos costeros, en jardines y adornando las calles y avenidas importantes. La época de floración de la adelfa es el verano pero si el tiempo se mantiene en las condiciones adecuadas, bajo un clima suave y heladas poco agresivas, podemos disfrutar de las flores de ese arbusto todo el año, o al menos, hasta bien entrado el otoño. Además, es muy resistente a las temperaturas secas gracias a su envidiable sistema de raíces profundas, siempre en busca de agua.
Riego
Ya que los terrenos que admite la adelfa pueden ser bastante áridos, las necesidades de humedad no serán demasiado exigentes. Los ambientes próximos a la costa le son propicios pero los suelos con concentración salina no son tan aceptados. Si decidimos probar a cultivar una adelfa lo tendremos fácil puesto que no exige muchos requerimientos al margen de los típicos.
Le gusta mucho el sol y aborrece los excesos de agua, así pues el terreno propicio tenderá más a la sequedad que al encharcamiento. El riego será por tanto tarea exclusiva en la época estival, pero en periodos de tres a cuatro días, negando el mismo cuando llueva, puesto que el agua de lluvia resulta suficiente. Si tenemos a nuestra adelfa, en vez de en suelo, en maceta, el riego sí que es conveniente a diario.
Suele ser fuerte ante el ataque de enfermedades pero estaremos atentos ante la aparición de pulgones en primaveras poco lluviosas. Por otro lado, las cochinillas pueden ser también origen de algún problema con el crecimiento sano de la adelfa. Lo mejor es actuar cuanto antes con algún insectida que erradique la infección de la planta de forma eficaz y sin alterar demasiado su aspecto.
Usos y curiosidades
Ante un arbusto de probada resistencia como es la adelfa, no es de extrañar que se encuentre entre nosotros desde muy antiguo. Tanto es así, que muchas pruebas apuntan a su existencia en periodos remotos como el mioceno o el oligoceno. En tiempos antiguos, mascar hojas de adelfa mezcladas con miel era considerado un método infalible para combatir la sarna. De la madera se obtenía carbón para pólvora. Varios son los relatos bélicos que admiten la falta de predisposición de las tropas por un envenenamiento por medio de la adelfa.
La mayor parte de la adelfa cultivada de forma profesional tiene como fin el adorno floral y el ornamento decorativo. De sus flores y hojas se han extraído importantes elementos que, aplicados en la medicina natural, pueden emplearse en el tratamiento de ciertas dolencias del sistema digestivo, pero siempre bajo supervisión de un especialista, puesto que la sobredosis puede resultar fatal. Su jugo amargo puede ser aplicado con fines cardiotónicos. Es esencial que la planta no se deje al alcance de los más pequeños de la caso para evitar casos de intoxicación.
Tras el nombre científico de 'Nerium Oleander' se esconde una planta de la familia de las apocinaceae, de origen plenamente mediterráneo. La adelfa es un arbusto cuyo nombre deriva de una deidad marina llamada Nereus, famoso en mitología por sus hijas, las Neréidas. Por su parte, el término 'oleander' se relaciona con la semejanza de las hojas del árbol del olivo y a su correspondiente nombre latino. Llama la atención su denominación vasca 'Eriotz-orri', que significa hoja de muerte, seguramente por su toxicidad.
Descripción
Se trata de un arbusto perennifolio que llega a alcanzar los 4 metros de altura. La corteza es de un tono entre el gris y el marrón claro; igualmente reseñable es lo lisa y recta que es. Su crecimiento es bastante rápido y presenta unas hojas con un visible nervio central que se ramifica de forma múltiple. El color de la hoja es de un verde muy intenso. Las flores de la adelfa poseen una fragancia penetrante y destacan por su voluptuosidad y por sus colores llamativos: blancas, amarillas, anaranjadas, rojas y rosas.
Cultivo
adelfaPodemos encontrarla poblando las orillas de caudales de agua, en terrenos costeros, en jardines y adornando las calles y avenidas importantes. La época de floración de la adelfa es el verano pero si el tiempo se mantiene en las condiciones adecuadas, bajo un clima suave y heladas poco agresivas, podemos disfrutar de las flores de ese arbusto todo el año, o al menos, hasta bien entrado el otoño. Además, es muy resistente a las temperaturas secas gracias a su envidiable sistema de raíces profundas, siempre en busca de agua.
Riego
Ya que los terrenos que admite la adelfa pueden ser bastante áridos, las necesidades de humedad no serán demasiado exigentes. Los ambientes próximos a la costa le son propicios pero los suelos con concentración salina no son tan aceptados. Si decidimos probar a cultivar una adelfa lo tendremos fácil puesto que no exige muchos requerimientos al margen de los típicos.
Le gusta mucho el sol y aborrece los excesos de agua, así pues el terreno propicio tenderá más a la sequedad que al encharcamiento. El riego será por tanto tarea exclusiva en la época estival, pero en periodos de tres a cuatro días, negando el mismo cuando llueva, puesto que el agua de lluvia resulta suficiente. Si tenemos a nuestra adelfa, en vez de en suelo, en maceta, el riego sí que es conveniente a diario.
Suele ser fuerte ante el ataque de enfermedades pero estaremos atentos ante la aparición de pulgones en primaveras poco lluviosas. Por otro lado, las cochinillas pueden ser también origen de algún problema con el crecimiento sano de la adelfa. Lo mejor es actuar cuanto antes con algún insectida que erradique la infección de la planta de forma eficaz y sin alterar demasiado su aspecto.
Usos y curiosidades
Ante un arbusto de probada resistencia como es la adelfa, no es de extrañar que se encuentre entre nosotros desde muy antiguo. Tanto es así, que muchas pruebas apuntan a su existencia en periodos remotos como el mioceno o el oligoceno. En tiempos antiguos, mascar hojas de adelfa mezcladas con miel era considerado un método infalible para combatir la sarna. De la madera se obtenía carbón para pólvora. Varios son los relatos bélicos que admiten la falta de predisposición de las tropas por un envenenamiento por medio de la adelfa.
La mayor parte de la adelfa cultivada de forma profesional tiene como fin el adorno floral y el ornamento decorativo. De sus flores y hojas se han extraído importantes elementos que, aplicados en la medicina natural, pueden emplearse en el tratamiento de ciertas dolencias del sistema digestivo, pero siempre bajo supervisión de un especialista, puesto que la sobredosis puede resultar fatal. Su jugo amargo puede ser aplicado con fines cardiotónicos. Es esencial que la planta no se deje al alcance de los más pequeños de la caso para evitar casos de intoxicación.
Gracias por la info, Meular, si no es por ti ni me entero de que planta salía en el capítulo (en el bote leí aloe vera y cuando lo mencionó Margarita oí asdfgjh seca ). Con tu permiso añado lo que pone la wiki respecto a los usos medicinales y la intoxicación por adelfa:
Contiene principios activos de propiedades cardiotónicas y diuréticas.
Es una planta muy venenosa y totalmente desaconsejada para uso particular con acciones muy fuertes sobre el corazón en dosis pequeñas, por esta razón su uso debe estar sujeto a control médico.
La intoxicación por adelfa es parecida a la intoxicación digitálica, entre 4-12 horas después de la ingesta se producen alteraciones gastrointestinales acompañadas de náuseas y vómitos, con deposiciones diarreicas sanguinolentas, vértigo, ataxia, midriasis, excitación nerviosa seguida de depresión, disnea, convulsiones tetaniformes y arritmia en aumento, aparece taquicardia, fibrilación auricular y bloqueo con parada cardíaca.
Conviene en caso de que aparezcan los primeros vómitos administrar fármacos analépticos, compuestos que tienen la virtud de controlar el ritmo cardíaco hasta que se normalice por completo.
En zonas rurales se preparaba una loción para uso externo como parasiticida contra la sarna utilizando las hojas frescas de adelfa mezcladas con miel y aplicada como ungüento.
Lo que está en negrita lo he añadido yo, ufffffff menos mal que a Irene no le ha dado fuerte la reacción a esta planta sino ahora estaría haciendo compañía al padre de Juan.
Contiene principios activos de propiedades cardiotónicas y diuréticas.
Es una planta muy venenosa y totalmente desaconsejada para uso particular con acciones muy fuertes sobre el corazón en dosis pequeñas, por esta razón su uso debe estar sujeto a control médico.
La intoxicación por adelfa es parecida a la intoxicación digitálica, entre 4-12 horas después de la ingesta se producen alteraciones gastrointestinales acompañadas de náuseas y vómitos, con deposiciones diarreicas sanguinolentas, vértigo, ataxia, midriasis, excitación nerviosa seguida de depresión, disnea, convulsiones tetaniformes y arritmia en aumento, aparece taquicardia, fibrilación auricular y bloqueo con parada cardíaca.
Conviene en caso de que aparezcan los primeros vómitos administrar fármacos analépticos, compuestos que tienen la virtud de controlar el ritmo cardíaco hasta que se normalice por completo.
En zonas rurales se preparaba una loción para uso externo como parasiticida contra la sarna utilizando las hojas frescas de adelfa mezcladas con miel y aplicada como ungüento.
Lo que está en negrita lo he añadido yo, ufffffff menos mal que a Irene no le ha dado fuerte la reacción a esta planta sino ahora estaría haciendo compañía al padre de Juan.
Madre mía pobrecilla Irene, antes de saber lo que le iba a pasar, llegué a pensar que iba a abortar y todo la chiquilla, me dio una penita, tan enfermita, sobre todo después de la coyunda marital...
Gracias, Meu por la información, gracias a la culturilla general estamos aprendiendo muchísimas cosas.
Gracias, Meu por la información, gracias a la culturilla general estamos aprendiendo muchísimas cosas.
Esta planta está en casi todas las autovías y autopistas de España en la medianas.
Sabía que era venenosa, de echo a mi la de flor blanca que me encanta la compré para el jardín pero no vivía pensando que los perros puedieran liarmela aunque la puse inaccesible a aminales y niños por su toxicidad, casi que cuando se murió me relajé de pensar que mis perros estaban a salvo de ella.
Sabía que era venenosa, de echo a mi la de flor blanca que me encanta la compré para el jardín pero no vivía pensando que los perros puedieran liarmela aunque la puse inaccesible a aminales y niños por su toxicidad, casi que cuando se murió me relajé de pensar que mis perros estaban a salvo de ella.