©Mediaset EspañaDías de máxima discreción en el entorno de Amador Mohedano. El hermano de Rocío Jurado, a sus 71 años, lleva hospitalizado desde el viernes 18 de julio en un centro médico de Jerez de la Frontera. Hasta ahora, el ingreso se había mantenido en la más estricta intimidad, pero su estado de salud ha despertado preocupación tras salir a la luz.
Según ha revelado el reportero Álex Álvarez en el programa 'Tardear', Mohedano está siendo sometido a diferentes pruebas para conocer el origen de su dolencia. No se ha hecho público ningún parte médico y, hasta el momento, ni el hospital ni su familia habían querido confirmar la noticia. Fue su hijo Salvador quien decidió llevarle al hospital tras verle mal en casa y desde entonces permanece ingresado, aunque estable.
Amador Mohedano en una de sus últimas apariciónes en el programa 'Tardear'
El propio Amador, visiblemente débil, ha querido tranquilizar a su entorno con un breve mensaje enviado al equipo del programa: "Estoy en el hospital, estoy mejor, aquí con pruebas y con todo". Un gesto que, aunque tranquilizador, no ha evitado que crezca la preocupación, especialmente al tratarse de una figura muy mediática acostumbrada a dar la cara.
La última vez que se vio públicamente a Amador Mohedano fue en el funeral de Michu, expareja de su sobrino José Fernando. Allí apareció visiblemente más delgado y con dificultades para caminar. "Estoy con mucha pena, una chica tan joven... Estamos todos hechos polvo...", dijo entonces. Desde aquel momento, se temía por su estado físico y anímico. Por el momento, sigue ingresado a la espera de nuevas pruebas médicas que determinarán su evolución.
Amador Mohedano no recibe la visita de sus hijos Chayo, Fernando y Amador
Una familia que guarda silencio
En estos momentos, es su hijo Salvador quien está más pendiente de su estado de salud, acudiendo al hospital al salir del trabajo, mientras que sus otros hijos, Chayo, Fernando y Amador, no se han desplazado desde Madrid. Tampoco se ha pronunciado Rosa Benito, madre de sus hijos y con quien mantuvo un matrimonio de 35 años. La situación, aunque controlada por el equipo médico, sigue despertando inquietud por la falta de información oficial. Solo queda esperar a que las pruebas aclaren el diagnóstico y Amador pueda volver pronto a casa.
