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La tensión se apoderó de 'Vamos a ver' durante la emisión de este lunes 29 de julio. Joaquín Prat entrevistaba a María, madre de un joven que ocupa la vivienda que una mujer llamada Cristina compró con todos sus ahorros, y la conversación se desarrolló de manera tensa.
La situación se fue complicando a medida que María respondía con evasivas a las preguntas de Prat. Acusó al programa de parcialidad, defendió a su hijo alegando que el anterior dueño le habría dado permiso para quedarse y llegó a lanzar frases como "te pido que me hables con un poco de respeto" o "estás haciendo preguntas impertinentes". Prat, visiblemente sorprendido por la situación, tampoco intentó reconducir la entrevista y se mostró bastante alterado.
Joaquín Prat se enfrenta en directo en 'Vamos a ver' a la madre de un okupa
El conflicto tiene su origen en una compraventa complicada. Cristina, la propietaria afectada, compró un chalé sabiendo que estaba ocupado, pero confiando en el compromiso verbal de que los inquilinos abandonarían la casa en unas semanas. Sin embargo, la promesa se rompió. Mientras el joven permanece en la vivienda, Cristina ha tenido que mudarse con su hija a casa de sus padres y su marido se ha trasladado a otro domicilio.
Tras más de diez minutos de entrevista, el presentador mantuvo firme su postura: "Tú eres la madre. La responsabilidad de tu hijo no puede recaer en una familia que compró legalmente su casa". Finalmente zanjó la entrevista sin ninguna conclusión clara por la negativa de la protagonista a contar la historia completa: "Me tengo que recuperar de la entrevista, hacemos una pausa", sentenció Prat.
El presentador de 'Vamos a ver' defiende a Cristina, la propietaria de la vivienda ocupada
Una entrevista marcada por reproches e interrupciones
El choque entre Joaquín Prat y María encendió el plató de 'Vamos a ver'. "¿Me dejas terminar de hablar o cojo el pinganillo y os dejo con la palabra en la boca?", llegó a advertir, cansada de las interrupciones. El presentador, por su parte, siguió defendiendo la posición de Cristina, la propietaria. Además, la madre del okupa acusó al programa de no contrastar ambas versiones y criticó el enfoque del magacín: "No hace falta ir a Harvard para entender lo que estoy diciendo", sentenció, visiblemente molesta. El intercambio terminó con una despedida muy tensa.
